Manifestar y luchar por los derechos
Manifestar y luchar por los derechos

Este 8 de marzo se vuelve a debatir la deuda que el estado aún tiene con el pueblo.

Los femicidios, los abusos, la violencia sexual, psicológica y económica son algunos de los tipos de violencia a los que a diario nos enfrentamos las mujeres de las grandes urbes. Además de estas violencias hay que sumar también las que sufren las mujeres y niñas que viven en los campos, en los territorios indígenas, alejadas de las ciudades e impregnadas ancestralmente por la cultura machista.

La explotación laboral de niñxs, la práctica naturalizada del chineo (denigrante práctica de violación a niñas por parte del blanco no perteneciente a la comunidad. Asociado a la invasión territorial) por ejemplo, hacen notar que el machismo patriarcal más antiguo aún esta vigente en nuestras sociedades tanto en el centro de país como así también en el interior de todas las provincias.

La lucha en defensa de los derechos de las mujeres, niñas y niñxs es amplia y de constante labor, desde Campaña por la Emergencia Nacional en Violencia contra las Mujeres, se vienen realizando un trabajo alrededor de este tipo de violencias.

“Durante el primer año de la pandemia trabajamos en una red de promotoras territoriales en prevención de violencia y en una red de voluntarias, porque la pandemia vino a dejarnos en evidencia los problemas de la vida del pueblo, de la gente y en particular de las mujeres”, declaró Belén Spinetta referente de Campaña por la Emergencia Nacional en Violencia contra las Mujeres.

En los últimos años ha habido respuestas ante las demandas del movimiento de mujeres, pero aún no se ha podido avanzar efectivamente y poner un freno a las situaciones violentas y lamentablemente es una problemática que crece.

“Me parece que hay que destacar que hubo un avance con la creación del Ministerio de las Mujeres, género y diversidad,  el ministerio mismo avanzó en el reconocimiento institucional del trabajo de las promotoras, pero todavía queda la deuda pendiente de que se reconozca económicamente”, afirmó Belén quien sostiene que se implementaron políticas públicas importantes, como el plan Acompañar para mujeres víctimas de violencia,  pero que no tuvo el alcance esperado en los territorios donde las mujeres más lo necesitaban.

Este 8 de marzo en particular la consigna y la tarea por la que luchar es en torno a la DEUDA y todo lo que representa la palabra deuda hoy para las mujeres. La deuda vista desde lo político, desde lo social, desde lo económico y cultural. “Este 8 de marzo se pone otra vez en discusión las dobles tareas de las mujeres las tareas de cuidado, el trabajo no remunerado dentro del hogar y las violencias y desigualdades dentro de los lugares de trabajo por fuera de la casa”, declaró Spinetta.

La desigualdad salarial, la discriminación en relación a los ascensos en los puestos de trabajo y las no licencias por violencia de género son algunas de las problemáticas vigentes que afectan a las mujeres dentro de los espacios de trabajo por fuera del hogar.

“Nosotras seguimos planteando la necesidad de que se declare la Ley de Emergencia en Violencia contra las mujeres. Hay un proyecto presentado en el Congreso, en el año 2015 logramos que se diera media sanción en el Senado, pero se cajoneó y entendemos que este proyecto también es parte de las emergencias que atraviesa el conjunto del pueblo hoy”, aseguró Belén.

Este 8 de marzo está atravesado por la situación económica que vive el país, ya que el gobierno se encamina a aprobar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y por eso las consignas de las organizaciones en todo el país es: “La Deuda es con nosotras”.

“Nos preocupa mucho que se le dé el visto bueno a ese acuerdo con el Fondo Monetario, porque entendemos que todos los recursos hoy tienen que estar destinados a atender las necesidades más urgentes de la gente y en particular de las mujeres, hay muchas demandas por resolver. Que haya más presupuesto para la implementación de las políticas públicas que se necesitan y para la declaración de emergencia, que además plantea,  el acceso a un salario mínimo vital y móvil para las mujeres víctimas de violencia”, contó Spinetta.

La extensión del patrocinio jurídico gratuito en todo el país para las mujeres que sufren violencia de género, la construcción de refugios y salidas habitacionales para las mujeres que no pueden salir de su hogar porque dependen del violento, es parte de la deuda que el Estado aún tiene con la comunidad.

“La deuda más importante es que se palpe, que se vea realmente que se está haciendo para frenar los femicidios, lo principal es poder trabajar en la prevención de las violencias, en que las mujeres puedan salir de esas situaciones y el rol del Estado tiene que ser fundamental. Y este 8 de marzo en todo el país las mujeres volvamos a salir a las calles, para poner sobre la mesa las problemáticas y las deudas pendientes, este 8M la deuda es con nosotras”, concluyó Belén

2022-03-07 12:01:00
Categoría: 8M
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