La ministra de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual Estela Díaz entregó, junto al intendente de General Rodríguez Mauro García y al subsecretario de Deportes Javier Lovera, las medallas y las copas a los equipos que llegaron a la final: Pehuajó quedó en el segundo puesto, mientras que Olavarría y Necochea quedaron en el tercer y cuarto puesto.
“Las pibas le ponen garra, entusiasmo y tienen que seguir jugando contra los prejuicios porque todavía el fútbol femenino tiene que enfrentar muchas resistencias y dificultades para acceder a los recursos, a las canchas, para todo. En estos últimos años hubo una irrupción muy importante del fútbol femenino, es una marea que no para” señaló Estela Díaz.
General Rodríguez se consagró campeón del torneo de fútbol femenino, luego de un partido en el que no se sacaron ventajas. Las rodriguenses se impusieron por 4 a 3 en los penales ante la selección de Pehuajó. Las pehuajenses comenzaron ganando por la mínima diferencia, pero en el segundo tiempo General Rodríguez logró empatar el marcador, obligando a la definición a través de los tiros directos al arco.
El tercer puesto lo disputaron los equipos de Olavarría y Necochea, donde el primero logró imponerse en esta primera edición de la «Copa Igualdad”. Durante el primer tiempo, las necochenses fueron superiores y ganaban por dos tantos al finalizar los primero 45 minutos. Sin embargo, hubo cambios en Olavarría para el segundo tramo del partido y lograron darlo vuelta en el complemento. Con goles de Daiana Leonardo, Nadia Lucio y Luz Bulant, las olavarrienses ganaron por 3 a 2.
“Es una satisfacción que estén en un estadio mundialista jugando esta final. Eso es lo que quisimos con esta Copa Igualdad. El fútbol femenino es el derecho en igualdad al disfrute, al deporte, a la recreación, al juego. Es la potencia colectiva para gambetear al patriarcado” señaló la ministra durante la ceremonia de premiación.
Además, se hizo entrega de un reconocimiento a las árbitras Jimena Sotelo, Camila Olivares y Giselle Martinez, destacando su labor en el campeonato. El arbitraje es un trabajo profundamente masculinizado que es necesario que cada vez más mujeres y disidencias puedan desarrollar.
En la entrega de premios participó la jugadora pionera Elba Selva, goleadora en el mundial de México del 71 donde el equipo argentino convirtió cuatro goles en el partido con Inglaterra.
Entre julio y septiembre se realizó el torneo en las regiones Primera, Cuarta, Quinta y Séptima del Ministerio del que participaron 46 selecciones municipales y más de 900 jugadoras bonaerenses.
El torneo comenzó el 16 de julio en la localidad de 25 de Mayo, donde se presentaron 7 selecciones de fútbol femenino de la Región Séptima. Jugando una fecha más en Roque Pérez y finalizando en la localidad de Tapalqué. Allí ganó el torneo regional el seleccionado de Olavarría. El segundo lugar fue para 25 de Mayo y el tercero para Bolívar.
En agosto comenzó el torneo en la Región Primera, con la participación de 14 selecciones que jugaron en la localidad de Pilar y General Rodríguez. Salieron campeonas las jugadoras de General Rodríguez y obtuvo el segundo puesto la selección de Pilar, mientras que el tercer lugar fue para Mercedes.
En el mes de septiembre fue el turno de las Regiones Cuarta y Quinta. Allí, el puntapié inicial fue el 10 de septiembre en la localidad de Castelli de la Región Quinta con 16 selecciones municipales, Necochea resultó la puntera de los partidos que se jugaron en la localidad de Villa Gesell y en General Paz. Monte se quedó con el segundo puesto, mientras que General Pueyrredón se llevó el tercer puesto.
La Región Cuarta tuvo como sedes las localidades de Pehuajó y Alem, con la presencia de nueve seleccionados. Pehuajó se llevó el triunfo, Carlos Casares el segundo lugar y Alem el tercero.
Para llegar a la final en Mar del Plata, se realizó un cuadrangular con las cuatro campeonas de cada Región. En la localidad de General Guido jugó el seleccionado de General Rodríguez, que le ganó a Necochea y se consagró finalista junto a Pehuajó que se impuso ante Olavarría.
En 2019 el fútbol femenino se profesionalizó en Argentina, luego de una intensa lucha del movimiento feminista y de las futbolistas que pusieron en evidencia las desigualdades que operan en el acceso al derecho al deporte, y a la ocupación del espacio público por parte de mujeres y LGTBI+.
Si bien se avanza en la reducción de las desigualdades, las futbolistas mujeres aún no logran paridad de representación en espacios deportivos. En los planteles “profesionales” muchas jugadoras no están contratadas y la brecha salarial es muy amplia.
El Estado bonaerense asume la tarea de generar políticas públicas que garanticen el acceso a la práctica deportiva sin disciminación y el impulso a instancias de diálogo con las jugadoras y cuerpos técnicos para conocer las realidades en un ámbito de muchas desigualdades.
Fuente: Ministerio de Mujeres, Políticas de Géneros y Diversidad Sexual PBA
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