La lucha de los trabajadores y las trabajadoras del INCAA en resguardo y respaldo de la cultura nacional

Los sucesos del pasado lunes en la ciudad de Buenos Aires frente al Instituto Nacional de Cine y artes audiovisuales tan solo fue el desencadenante de una mala gestión que no dio respuesta a los reclamos de los y las trabajadoras de todos los sectores que lo componen. El circuito nacional audiovisual se encuentra en crisis.

Con la nueva gestión de gobierno nacional y con el nuevo presidente del instituto, nacieron nuevas expectativas en cuanto a las políticas de fomento que se podrían desarrollar en el INCAA, pero fueron sólo eso, expectativas “La gestión de Puenzo se caracterizó por continuar como en la gestión macrista” declaró Marina Pessah, vicepresidenta Documentalistas de Argentina (DOCA).

Estar a cargo de la dirección del INCAA supone entre varios otros puntos, tomar medias y planificar la exhibición de la producción audiovisual, es decir buscar y determinar las pantallas para presentar el material, el tiempo de duración de cada exhibición, para poder así fomentar el trabajo de la industria nacional y cumplir con lo establecido en la ley de cine alrededor de las políticas de exhibición.

“Todas lo que funciona y está implementado en el marco de la ley de cine hoy, dentro del instituto, es porque el sector trabajador presionó, movilizó ,exigió e hizo pública las necesidades urgentes que había de que funcionará la asamblea general y que funcionara el consejo asesor que es el órgano donde están representados absolutamente todos los sectores, directores, gremios, actores todas las partes que componen el quehacer audiovisual en donde se consensúan y se implementan las políticas para llevar adelante incluso el presupuesto”, detalló Marina en relación al poco acompañamiento que recibieron por parte del ahora ex director del INCAA.

Por su parte, Gerardo Suarez Vivián, productor freelance de la Red Sur Sur declaró, “Las políticas actuales del INCAA son políticas que no nos tienen en cuenta, ni las anteriores ni las actuales, por eso desde ese lugar seguimos estando afuera. No hemos tenido la oportunidad de tener proyectos vinculados al INCAA, los motivos son varios, hay una falta de mirada federal en lo que respecta al mapa de la provincia de Buenos Aires y el país en general, por eso nuestra gestión audiovisual es mayoritariamente independiente, con recursos propios o privados, en algunas ocasiones hacemos proyectos del ámbito universitario municipal”

Y concluye “Las trabajadoras y trabajadores que estamos en Red Sur Sur nos damos cuenta que las políticas actuales del instituto no nos representan, como no nos representaban las anteriores, hubo un estado de abandono en lo que fue toda la pandemia y necesitamos urgentemente un cambio en las políticas donde seamos tenides en cuenta”.

El presupuesto destinado al instituto es otro de los temas álgidos en la gestión de Puenzo y de la gestión anterior también. En el año 2017 el gobierno de Mauricio Macri incorporó un artículo en la Ley de Presupuesto aprobada por el Congreso de la Nación que puso plazo de vencimiento a las leyes de asignación específica que quedaban vigentes y que permiten el financiamiento del cine dispuesto en las Leyes de Fomento de la Actividad Cinematográfica Nº 17741 y de Servicios de Comunicación Audiovisual N° 26522, el fondeo de los institutos nacionales de la Música y del Teatro, las producciones del Sistema Nacional de Medios Públicos y el funcionamiento de la Defensoría del Público de los Servicios de Comunicación Audiovisual.

La fecha de vencimiento que se fijó en el artículo cuarto de la Ley N° 27432, promulgada en diciembre de 2017, fue de cinco años y vence el próximo 31 de diciembre de 2022. Lo que sucederá en esa instancia será que los impuestos que se establecieron para afectarse específicamente a las industrias culturales no dejarán de cobrarse ni serán eliminados, sino que pasarán a rentas generales.

“Hace prácticamente 4 años que venimos denunciando que el gobierno de Macri en diciembre de 2017 modificó la reglamentación de la duración de los aportes a ese fondo de fomento estableciendo como fecha de caducidad la de 31 de diciembre de este año. Puenzo nunca tomó el rol que se esperaba como presidente del INCAA y es el sector trabajador el que se cargó al hombro la lucha para que el 31 de diciembre de este año no venzan los aportes al fondo de fomento. Sin esos fondos toda la cultura puede desaparecer”, sostiene Marina Pessah.

El reclamo explícito es para preservar estos aportes que provienen de diferentes sectores: cableoperadores, televisoras, lotería nacional y se distribuyen para las bibliotecas, para las televisoras comunitarias, para el teatro, para la música y para el cine. La preocupación real es cómo se distribuye el fondo de fomento a la cultura nacional, los aportes van a seguir estando, pero como van estar dentro de la órbita de la jefatura de gabinete y no se puede saber cómo será distribuido ese ingreso.

“Venimos denunciando activamente y trabajando activamente todo el sector en unidad, para alertar a les legisladores que por favor esto sea tratando dentro de la comisión de presupuesto, que sea puesto en agenda y sea aprobado en la cámara de diputados para que estos fondos no desaparezcan” declara la vicepresidenta de DOCA.

Desde la comunidad de trabajadores y trabajadores audiovisuales le solicitan a la nueva dirección interina que pueda atender de forma urgente la fecha de caducidad del fondo de fomento, y comunicar el contenido del decreto presentado al poder ejecutivo sobre el destino de los fondos de fomento.

Que se escuchen los reclamos y necesidades de todo un sector trabajador de forma tal que se puedan mantener los puestos de trabajo, que se apueste a la producción nacional destinando de forma equitativa los fondos y que se exhiban las producciones nacionales.

Aldana Barrionuevo

Lic. en Comunicación Social con orientación en Periodismo (UNLP), Locutora Nacional de Radio y Televisión (ISER)y Community manager.