En Reconquista, Santa Fé, se le otorgó la libertad condicional a un hombre que abusó sexualmente de dos menores de edad y ejerció violencia de género de forma sistemática durante 17 años a su ex pareja.

Hace poco más de un año, en la Cuidad de Reconquista, Santa Fe se realizó una denuncia contra el señor Adrián Cesar Núñez por violencia de género y abuso sexual a dos menores de edad. Clara B. (su ex pareja) lo denunció por lesiones graves que le causó tras un hecho violento en abril del 2021 y luego de esta denuncia dos de los hijos de Clara tuvieron la valentía de denunciar los abusos físicos y sexuales que sufrieron por parte del acusado.

Tras las denuncias realizadas por abuso sexual de uno de los menores abusados (hijo de Núñez), en junio de 2021, el acusado fue detenido y se lo puso en prisión preventiva. Pero esa no fue la última denuncia, otro hijo de Clara (de una pareja anterior) también denunció que años atrás, cuando era menor de edad, fue víctima de abuso sexual.

Todas las denuncias realizadas fueron confirmadas. Los hechos de violencia que sufrió Clara fueron constatados y las denuncias contra Núñez por abuso sexual a menores también fueron ratificadas en Cámara Gesell.

El pasado 1 de julio, se conoció que al acusado le otorgaron la libertad condicional y que Núñez se encuentra en su domicilio con un dispositivo de control GPS en su cuello (es una especie collar que se debe poner voluntariamente) para monitorear donde se encuentra y con la restricción de acercamiento a las víctimas.

Hoy las miradas se posan en la fiscalía santafesina que ha demorado las investigaciones y dilató la aceptación y constitución como querellante al abogado Marcos Altamirano que representa a los menores abusados. Después de un año de presentada la solicitud como querellante para esta causa, aún no hay confirmación de la misma. ¿Por qué la urgencia de ser querellante en la causa por abusos? Porque lo habilita a realizar formalmente la acusación y expresar la voluntad de ejercer una acción penal. Pero les quitaron esa posibilidad y un abusador de menores hoy está en libertad.

Desde la fiscalía a cargo de Aldo Gerosa, que tiene las tres causas, alegan que es un trámite burocrático que se debe resolver para poder actuar como querellantes en las dos causas de abuso, pero esto recién lo comunican un año después de hechas las denuncias y las presentaciones iniciales del letrado, cuando a Núñez ya le otorgaron la libertad.

Por intención u omisión, los tiempos de la justicia no responden a las necesidades de las víctimas de violencia de género y de las infancias, tampoco las protegen, pero sí benefician al violento abusador. Por “demoras” en el trabajo de la fiscalía o por burocracia la justicia no es justa.

La situación judicial hoy es un poco más compleja, como lo menciona Altamirano, en estas instancias es complejo que se vuelva a dictar una nueva prisión preventiva. En tanto se solicitará una vez más en la fiscalía, que Altamirano tenga acceso como querellante en la causa para iniciar nuevamente las acusaciones y lograr justicia.

Aldana Barrionuevo

Lic. en Comunicación Social con orientación en Periodismo (UNLP), Locutora Nacional de Radio y Televisión (ISER)y Community manager.